lunes, 15 de abril de 2013

Hacia una nueva comprensión de nuestra realidad

La proximidad de dos estímulos puede generar ciertas fantasías...
Coaching en Sabadell,                  
Gestalt terapia  en Sabadell,
PNL en Sabadell,
Focusing,
Análisis Transaccional

¡Libérate del tabaquismo! ¡Puedes dejar de fumar!.  Más información siguiendo este enlace.


En el anterior artículo vimos diferentes formas de afinar  nuestra percepción... ¿qué despertaron en tu fantasía?,  pueden ser conclusiones, asociaciones,  especulaciones de todo tipo, algunas incluso ¡¡hasta genialidades!! Me gustaría saber algo de eso si quieres incluirlo como comentario al pie del blog.

A Paul Éluard se le atribuye la frase: “hay otros mundos pero están en éste”, no obstante estamos acostumbrados a percibir la realidad siguiendo ciertos estándares, ciertas formas de organizar lo que percibimos.

La psicología de la gestalt o teoría de la forma (la precursora de la actual psicoterapia Gestalt), en sus observaciones iniciales, descubrió que tenemos cierta tendencia a organizar los estímulos que recibimos del mundo externo en totalidades (gestalt en alemán) integradas en una forma. Esta tendencia humana obedece a ciertas leyes como la ley de la pregnancia (la forma resultante tiende a ser tan buena como lo permitan las condiciones externas) y otras subleyes complementarias.

Inteligencia emocional. ¡Libérate!. Más información en este enlace
Nos hallábamos aún en los años en  que la psicología centraba su atención en los estímulos externos antes que en el mundo interior de la persona. Fue Fritz Perls quien añadió a esta teoría de la percepción,  los contenidos internos (emoción, sentimiento, sensaciones corporales...) postulando con ello una Gestalt Terapia más holista, con  fundamentos también muy afianzados en la forma (el cómo) más que en una visión reduccionista (el porqué).

Se definieron a continuación los 8 principios organizadores de los elementos de nuestra percepción, principios que una vez establecen su inercia, difícilmente permitirán nuevos patrones aglutinadores de nuevas realidades ... difícilmente pero no imposible y en el anterior artículo pudimos comprobarlo.

Siguiendo un proceso de terapia gestalt o de coaching (en función de la orientación que queramos dar al proceso) aprendemos que todo depende del tipo de mirada que apliquemos a aquello que estamos observando, yo diría más, incluso depende del “lugar” de nosotros mismos desde el que observemos la realidad que nos envuelve... y con esto nos adentramos en un terreno familiar a la física cuántica y no tan distinto al coaching y/o la psicoterapia, la realidad de nuestro entorno depende del observador; es más, podemos trabajar nuestra propia identidad (auto imagen, definición, concepto, autoestima...), en función de cómo decidamos alquimizar aquello que nos “viene dado”

¿En qué persona me estoy transformando cuando adquiero nuevos aprendizajes y perspectivas partiendo de mi “realidad"? 

Una vez destacada una forma, cuesta percibir la otra.
Acerca de esto me gusta recordar el pasaje de Jung en su obra autobiográfica “Recuerdos, Sueños, Pensamientos“ en uno de sus viajes a Kenya y Uganda... transcribo un fragmento que recomiendo leer muy atento a las resonancias internas y... procurando recrear subjetivamente el paisaje inicial...

“...en esta amplia sabana nos esperaba un panorama sin igual. Hasta el más alejado horizonte se veían enormes manadas de animales: gacelas, antílopes, gnus, cebras, jabalíes, etc. En lento tropel, paciendo, inclinadas las cabezas, se movían las manadas, apenas se oía el melancólico chillar de un ave de presa. Era el silencio del eterno principio, el mundo tal como siempre había sido, en el estado del no-ser; pues hasta hace poco no existía nadie que supiese que se trataba de “este mundo”. ... Ahora era el primer hombre que reconocía que esto era el mundo y que mediante su saber sólo en este instante lo creó.

Aquí vi asombrosamente claro el significado cósmico de la consciencia... El hombre, yo, dio al mundo, en un acto creador imperceptible, el último toque nada más, el ser objetivo. Se ha atribuido este acto sólo al creador y sin meditar que de este modo vemos la vida y el ser como una máquina proyectada hasta en sus mínimos detalles, que sigue su marcha  absurdamente, junto con la psiquis humana, según reglas preconocidas y predeterminadas...   Ahora lo sabía y todavía más: el hombre es imprescindible para dar un último toque a la creación, pues ciertamente es el segundo creador del mundo, que da al mundo el ser objetivo, que sin ello transcurriría inadvertido, desapercibido, silencioso, comiendo, pariendo, muriendo, inclinando la cabeza a través de cientos de millones de años en la más profunda noche del no-ser, hacia un indeterminado fin.”

A la vista de lo expuesto podemos formular dos preguntas...

    - ¿Existe el objeto sin un observador que de fe de su existencia?  y de ser así....
    - ¿Lo percibimos tal y como es en sí mismo?

En el próximo artículo seguiremos trabajando con contenidos más prácticos...

www.josepguasch.com

Te invito a participar ampliando ideas, aportando sugerencias,  comentarios adicionales o compartiendo tus dudas,  en el apartado al pie del blog. 


Anterior artículoAlgunas sorpresas con la percepción del mundo externo
Siguiente artículo: El Viaje
Siguiente artículo relacionado: Valores, creencias y filtros de la realidad

Si estás interesad@ en un programa personalizado de coaching y/o psicoterapia, puedes ponerte en contacto conmigo a través de:

mail: jspguasch@gmail.com; Web: www.josepguasch.com: telf. 615.56.45.37

Si quieres recibir periódicamente mi blog, puedes suscribirte al mismo en el apartado “Suscribe” en el desplegable del lateral derecho en la parte superior.

También puedes solicitar mi boletín informativo gratuito que te remitiré periódicamente con artículos e información interesante  y práctica,  así como sobre próximas convocatorias, actividades y cursos:

Petición de boletín informativo           

Si conoces a alguien que pudiera estar interesado, ¡comparte esta información!.
www.josepguasch.com

Mi blog: Josep Guasch, coaching y psicoterapia